domingo, 7 de abril de 2019

UN FACILITADOR EN "LAS BAMBAS".

 Por Hans Gutiérrez
Director de DH FACILITADORES
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Una vez más, el gobierno peruano acudió a la figura de los FACILITADORES DE DIÁLOGO para lograr poner paños fríos y un acuerdo feliz frente a un conflicto social de preocupación nacional. Hoy, podemos decir que los tradicionales facilitadores (Iglesia y Defensoría del Pueblo) fueron apoyados por un facilitador de experiencia diferente. La facilitación peruana sigue creciendo!

La mina "Las Bambas" es un proyecto de extracción de cobre en la región Apurímac cuya inversión privada se estima en $10 mil millones de dólares, un nuevo mega proyecto. La actual administración de esta mina entró en conflicto con la población por ser contaminante y tener malas prácticas ambientales, a pesar de haber implementado un importante proyecto habitacional para los pobladores de la zona. Por esta y otras razones fue impedida de trasladar el mineral extraído bloqueando carreteras que costaron hasta 06 vidas humanas y muchos heridos entre civiles y policías.

El gobierno peruano, encabezado por el flamante Jefe de la PCM, Salvador del Solar, intermedió entre la población y la minera proponiendo a dos religiosos para facilitar el diálogo (El presidente de la Conferencia Episcopal Peruana, Miguel Cabrejos, y el cardenal Pedro Barreto) en busca de una solución. En ese sentido, se ha confirmado que este último fin de semana se han logrado sanos acuerdos que hacen pensar en la viabilidad del proyecto, aunque se siente todavía una frágil consistencia.


Esta fórmula no es nueva. Hace pocos años un conflicto minero en la región Cajamarca (mega proyecto Conga) trajo abajo la creedibilidad del gobierno de Ollanta Humala, quien luego de intentos bastante rústicos y prepotentes acudió a las sotanas sacerdotales (monseñor Miguel Cabrejos y el padre Gastón Garatea) para borrar sus errores y lograr el funcionamiento extractivo que quedó truncado y sin éxito. 

Antes, hizo lo mismo Alan García proponiendo facilitadores de diálogo (Defensoría del Pueblo y Conferencia Episcopal) para evitar lo que luego se convirtió en el nefasto "Baguazo" un error histórico terrible que costó la vida de muchos peruanos.

Hoy, tenemos apoyando, tímida y cautelosamente, a este proceso (Las Bambas) a un facilitador experto en el trabajo de negociación de conflictos quien oportunamente propone gestos y acciones en el marco de un criterio técnico y poniendo, generosamente al servicio del propósito, herramientas para el diálogo y la búsqueda del consenso. Por su humildad, no mencionaré su nombre pero las imágenes le delatan y nos llena de orgullo saber que es docente de DH Escuela. 


Hemos evolucionado. Nuestras autoridades poco a poco comprendieron que tras la imagen lejana de peruanos con culturas diversas, laten corazones que reclaman una ciudadanía sin prejuicios y aspirante al desarrollo. Compatriotas rojiblancos otrora ausentes, que reclaman su espacio y derechos. Asimismo, aprendimos que dialogar es escuchar para descubrir puntos de interés, dolor y necesidades. Aprendimos que dialogar no es imponer, dialogar es respetar al otro.


¡¡La Facilitación peruana avanza, bravo!!

Hans Gutiérrez