Producto de una sesión de trabajo y del análisis de las múltiples
vertientes y manifestaciones de la facilitación les presento una nueva
definición de la facilitación:
"...Procesos y funciones que permiten interactuar con los paradigmas, pensamientos, sentimientos, emociones y manifestaciones (discursos, actitudes y prácticas) de personas y colectivos de modo tal que se favorezca el despliegue del conjunto de sus capacidades, facultades y potencialidades orientado a que alcancen equilibrio interno o equilibrio social para establecer relaciones, vínculos, entendimientos o acuerdos que eventualmente se pueden convertir en objetivos que deriven a acciones transformadoras... "
La facilitación tiene una dimensión de efectividad que se logra en un buen clima emocional. Así mismo, la facilitación se inscribe en un enfoque de desarrollo humano sostenible.
Sustentación
Una definición inclusiva de la facilitación tiene que tener la
capacidad de abordar las vertientes de facilitación del ser,
facilitación de procesos sociales (socioculturales y sociopolíticos) así
como facilitación de procesos organizacionales y las interacciones que
se dan entre estos tipos de facilitación. Partimos de concebir al ser
humano, así como a los colectivos, en la integralidad de su ser por eso
la importancia de un enfoque ontológico.
Además, tiene que tener la capacidad de incluir procesos estructurados, semiestructurados así como procesos mucho más abiertos y espontáneos donde el logro es buscar el equilibrio o la fluidez.
Es claro además que la facilitación se inscribe en una propuesta de servicio por lo tanto no busca ser el centro de atención que le corresponde legítimamente al grupo o a la persona a la que se acompaña en su propio proceso transformador.
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