El estrés
genera en el ser humano una reacción biológica, psicológica y social. Y aunque
los efectos biológicos son difíciles de percibir sin un diagnóstico, los
emocionales son más visibles y se vislumbran principalmente a través de la
ansiedad.
En
los peores casos, el estrés puede acarrear problemas de salud y desórdenes
mentales. Sin embargo, en sus inicios, puede
manifestarse mediante temblores,taquicardias, el llanto,
la irritabilidad, la tristeza, el enfado o la ira. El trabajo puede desencadenar
ese tipo de cuadros aunque lo ideal es que no suceda y que la persona, antes de
sentirse desbordada, reaccione.
A veces, los empleados asumen responsabilidades que escapan a su posibilidad y terminan por sobrepasarlos. Otras veces, se estresan al ingresar a un nuevo ambiente laboral que les es ajeno y al que les cuesta adaptarse.
Para que tu comienzo en el trabajo sea exitoso, no te sientas nervioso y mucho menos estresado, toma en cuenta estos 4 tips, consignados en el portal careerbuilder.es
1. Elimina las preocupaciones de tu mente - Todas las personas se preocupan sobre cómo será su nuevo
oficio. Ante ello, confía en ti y recuerda que fuiste contratado por
tu gran talento y habilidades. Siéntete seguro y
piensa positivamente ya
que así te sentirás motivado y podrás hacer frente a cualquier situación que se
te presente.
2. Aprende a priorizar - Probablemente te sientas abrumado las primeras semanas en
la empresa, ya que todo será nuevo para ti. Aquí la clave es priorizar. Es aceptable que cuando tengas dudas acudas a tu supervisor para encontrar las respuestas. Pregunta cuáles son las tareas a las que se debe dar prioridad y cómo deben ser
realizadas.
3. Sé puntual - Sé puntual y haz que esto sea un hábito. Llegar
a tiempo en la mañana y salir a la hora que te corresponda demuestra que
realmente respetas las reglas de la organización. Asimismo,
refleja que te sientes bien allí y que respetas el tiempo de todas las personas
que forman parte de la empresa.
4. Almuerza con tus compañeros de trabajo - Tener una pausa para almorzar con tus colegas constituye un gran momento para construir relaciones en tu entorno laboral. Esto no sólo te hará sentirte feliz trabajando sino también más cómodo y motivado a la hora de realizar tus tareas.
Fuente: Universia Perú
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